Por: Lic. Danny Rafael Ureña F.
Resulta a ser que desde hace tiempo los opositores al gobierno de Leonel Fernández vienen anunciando que este realizará una reforma tributaria.
Por su lado el Súper Ministro de Ascienda Vicente Bengoa califica de mixtómanos a los sectores de la oposición que vienen anunciando estas medidas.
En esta semana el mismo Vicente Bengo hace un anuncio que deja pasmada a toda la sociedad. Cito "Aumentarenos 10 pesos a los impuestos de la gasolina". es decir que nueva vez nos enfrentaremos a un aumento de la gasolina de un 25 por ciento en los impuestos. Es decir que de 41 pesos que se paga de impuesto en la actualidad, estos se incrementan a 50 pesos y piquito, o mas bien mas de 50 y menos de 51.
Esto es evidencia de que nuevamente la población se ha dejado tomar el pelo del gobierno, ya que en las elecciones pasadas muchos recibieron 1000 pesos o quizás 500, por sufragar a favor del congreso del gobierno, hoy este al aumentar los impuestos a la gasolina le cobrara con creces esta dádiva a toda la población, ya que este hecho trae consigo el aumento de los precios en los pasajes, lo que se transportara en el aumento de todos los productos de la canasta básica de todos los sectores humildes y desposeído de esta nación. A Dios que reparta suerte.
Y lo grande es que la reelección asoma la cabeza, llena de pelos mal peinados, de piojos y caspa mal oliente, y no porque Leonel tenga la cabeza mal peinada, que en realidad no la tiene bien del todo por los lambones, los mediocres, los sinvergüenzas que le rodean que no tienen otra cosa más que asegurarse un puestecito en el gobierno. Si viene otro, saben que se van a la basura, donde tienen que estar.
La reelección desguaza a quien pasa más de dos períodos. Es más, al segundo, ya comienzan a verse los calzoncillos rotos. Así es que, Señor Presidente, no se deje llevar de los lambones, esos que solo le aplauden para tan solo verlo sonreír. Póngalos en su puesto, donde merecen estar, y si quiere reelegirse, hágalo, pero aténgase a las consecuencias, o pierde las elecciones, o gana y pierde en simpatía. Usted sabrá.
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